La Policía de Buenos Aires contará con la primera oficial transexual de Argentina

La Policía de la provincia de Buenos Aires, mayor fuerza policial de Argentina, se ha convertido en la primera de las fuerzas de seguridad del país en incorporar a sus filas a una oficial transexual. La agente, que ingresó a la Escuela de Policía de Olavarría tras su proceso de reasignación sexual, se graduó allí recientemente, y formará parte del operativo de seguridad en la costa atlántica argentina durante la temporada de verano.

El ministro de Justicia bonaerense, Ricardo Casal, valoró positivamente este hecho al considerar que marcará un antes y un después en la historia de la policía provincial, y que servirá para romper con ciertos prejuicios. “En esta etapa del país donde se amplían derechos, consideramos importante poder brindar esta posibilidad de capacitación y trabajo a alguien que decidió cambiar de sexo”, aseguró Casal, quien decidió la incorporación de la agente a la escuela siendo aún ministro de Justicia y Seguridad, antes de que se aprobara el desdoblamiento de ambas carteras.

Cabe recordar que, ya en 2011, la entonces ministra de Seguridad Pública del país, Nilda Garré, firmó una resolución que obligaba a los Cuerpos Policiales y a las Fuerzas de Seguridad federales a «respetar la identidad adoptada por travestis y transexuales» y a permitirles que «puedan usar el uniforme que corresponda a su percepción de género«. Con esta medida, Garré aseguraba su intención de combatir conductas transfóbicas y homófobas, así como la búsqueda de la convivencia en un “estado democrático y moderno”.

Ya hay otras dos personas transexuales que forman parte de las Fuerzas de Seguridad argentinas, si bien es cierto que en ambos casos el proceso de reasignación sexual se produjo siendo ya miembros de dicha institución. De esta manera, Argentina sigue haciendo méritos para convertirse en uno de los lugares del mundo más avanzados en materia de reconocimiento de derechos LGTB, tras la aprobación del matrimonio igualitario en 2010, y de una avanzada ley de identidad de género, en 2012.