GIRASOL condena los asesinatos homófobos en Tel Aviv
Desde GIRASOL (Coordinadora de Asociaciones LGBT de Andalucía, Ceuta y Melilla), a través de los medios de comunicación de ámbito autonómico, queremos trasladar nuestra más firme condena ante los asesinatos homófobos ocurridos en Tel Aviv el Sábado día 1 de Agosto, donde un hombre la emprendió a tiros contra lesbianas, gais y transexuales en la sede de la Asociación LGTB de Tel Aviv, matando a dos personas e hiriendo a doce más, con distintos grados de gravedad.
Como no podría ser de otro modo, desde Andalucía nos solidarizamos con nuestros compañeros israelíes, y sentimos el “terrorismo homofóbico israelí” como propio. “No dudaremos en exigir justicia y medidas a la comunidad internacional” ha declarado Rafael Expósito, presidente de Girasol. Por su parte Mar Cambrollé, vicepresidenta de Girasol, añade “ De una vez por todas, los organismos internacionales tienen que tomar conciencia de la gravedad de los hechos que se producen casi a diario, aunque no siempre con la misma repercusión mediática, contra la población homosexual y transexual”. El colectivo transexual y homosexual está condenado aún en ocho países a pena de muerte y sigue siendo perseguido por grupos ultra-derechistas y fundamentalistas religiosos en decenas de Estados. Los Derechos Humanos de la población LGTB son vulnerados en muchas partes del mundo, ya sea con la complicidad del Estado o por grupos violentos y homófobos, sin que en la agenda de los principales líderes mundiales se haya marcado aún el “respeto hacia la orientación sexual e identidad de género” como una apuesta mundial. Es más, estamos viviendo un retroceso en cuanto a legislación en muchos países, donde se están aprobando medidas que impiden el desarrollo de los ciudadanos LGTB y criminaliza tanto a la homosexualidad como la labor de los activistas de Derechos Humanos en favor de los homosexuales y transexuales. No hace más de quince días se aprobó una “Ley homófoba” en Lituania, que prohíbe la “publicidad del hecho gay, lésbico y transexual” en los medios de comunicación de su país. Lituania es miembro de la Unión Europea, y sin embargo, ningún país ha ejercido su presión contra esta grave violación de los Derechos Humanos.
El ataque terrorista de carácter homófobo de Tel Aviv tiene una relación causa-efecto incuestionable. Desde las tribunas más conservadoras y ortodoxas judías hay una gran oposición a la dignificación de la homosexualidad en Israel, creando un clima de odio, y utilizando para ello medios de comunicación, instituciones públicas y cualquier plataforma que sirva de altavoz, para fomentar actitudes violentas y discriminatorias contra los homosexuales.
Desde Girasol venimos denunciando el peligro y lo gratuito que sale el insulto, la burla, la mofa, y la negación del status de ciudadanía para la población LGTB, creando así, un caldo de cultivo para que la intolerancia y las agresiones se conviertan en un hecho socialmente aceptable. Girasol, instará a los grupos políticos a que se comprometan en el Parlamento de Andalucía a la aprobación de una Ley autonómica contra la homofobia y transfobia. Asimismo, exigiremos a la Junta de Andalucía la creación de un Observatorio para la igualdad LGTB, y un compromiso claro, diáfano y contundente de CANAL SUR TV para que gais, lesbianas y transexuales no sigamos siendo tratados desde el estereotipo rancio, casposo y folclórico, (indigno de una región que se dice progresista) en la televisión pública de los andaluces, que también es la TV de gais, lesbianas, bisexuales y transexuales.
El terrorismo homófobo israelí, evidencia que aún nos queda mucho por conseguir y avanzar en relación a la plena equiparación de gais, lesbianas, bisexuales y transexuales. Para ello seguiremos trabajando, para expandir la tolerancia a donde aún no haya llegado, y defender lo ya conseguido, porque lo que no se defiende está abocado a la pérdida.
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dosmanzanas
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¡Olé! Más claro agua.
¿Es comparable la mención a Lituana con la que ha hecho Colegas a Irán en su nota de prensa?
¡Hum! A mí también me ha rechinado un poco, la verdad, aunque también es cierto que Girasol no está dando todo el día la tabarra con Lituania como si fuese el único país donde nos tratasen mal, tal y como hace algún otro colectivo con otro país.
No sé, puede interpretarse de varias formas.
NI de coña… Se está poniendo simplemente como un ejemplo de retroceso peligroso y de los peligros de criminalizar el discurso lgtb. Y es retroceso porque Lituania es un Estado miembro de pleno derecho de la UE. Creo que el ejemplo en este caso encaja perfectamente porque ese fomento del prejuicio es el caldo de cultivo es este tipo de hechos y la UE. Debería atajar lo que está pasando en Lituania, en cambio está viendo para otro lado mientras se aprueba una ley que es no solo violatoria de los derechos individuales sino que vulnera el derecho a la libertad de expresión. Si no se tratara de un país dentro de la UE y el componente político fuese otro, estaría de acuerdo en que es un ejemplo comparable.
«El terrorismo homófobo israelí»
No existe «el terrorismo homófobo israelí» lo mismo que no existe «el terrorismo homófobo español», sino «en Israel» o «en España». Me parece un lapsus corregible.
Completamente de acuerdo.
Estoy de acuerdo con Ave. Yo también me he dado cuenta de ese lapsus.
Mercedes: el ejemplo del fanatismo religioso en otro país de la zona, Irán, donde su presidente afirma que los homosexuales ni siquiera existen, también encajaría en un comunicado sobre Israel. Al menos, no veo diferencias suficientes como para reaccionar frente a caso y ver válido el otro.
Otra cosa son las fijaciones que hay detrás o, como decía otro comentarista, que hablan de Irán pero se olvidan de Arabia.
Zarevitz, por favor.
En este comunicado se hace mención expresa a la situación de los lgtb en todo el mundo (se menciona, por cierto, a los países que condenan a los homosexuales a la pena de muerte, lo cual incluye también a Irán) para reclamar un compromiso claro de los grandes líderes mundiales en contra de la homofobia; y se pone el ejemplo de Lituania porque el cambio legislativo allí introducido implica un retroceso respecto a la situación anterior y porque ocurrió hace tan solo quince días.
Las intenciones del comunicado de Colegas venían a ser, simplificando: «a ver cómo condenamos un atentado homófobo en Israel, lavando la cara a Israel, siguiendo con nuestra matraca de siempre para parecer más lgtb que nadie y sin que se note que nuestra implicación política es más importante que todo lo demás». No deja de ser curioso que, entre diez países que condenan la homosexualidad con la pena de muerte, Colegas siempre saque a relucir en sus comunicados el mismo.
Crasamet, sin favor. En el comunicado de Colegas nos hemos preguntado qué tenía que ver Irán en este atentado; si nos hacemos la misma pregunta respecto de Lituania, creo que la respuesta es que aún menos.
El punto de diferencia, creo que lo explicas bien, no está en los comunicados o en el carácter más o menos equiparable de ambas menciones, sino en quién es el comunicante en uno y otro caso. Y que conste que no me parece mal tener en cuenta el historial de cada cual para juzgar lo que dice, pero al menos que seamos conscientes de que estamos procediendo así.