La FECyLGTB califica la decisión del TSJ de Castilla y León sobre Ciudadanía como “extravagancia contra el fallo del Supremo”

De nuevo, el tribunal se posiciona por limitar o recortar Educación para la Ciudadanía, en perjuicio de nuestras y nuestros jóvenes Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales. La sentencia permite a los padres imponer su ideología a los hijos, incluso contra el bien superior del menor.

Este miércoles, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha fallado permitiendo la objeción de conciencia en la asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos en Castilla y León. Desde la FECyLGTB, (Federación Castellana y Leonesa de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales) no compartimos ni podemos entender como el TSJCyL considera, en contra de la sentencia del Tribunal Supremo, que se objete a una asignatura básica en el fomento de la igualdad y la no discriminación entre nuestras y nuestros jóvenes.

Para la FECyLGTB, al permitir que haya padres que se nieguen a que sus hijos reciban formación contra la discriminación, el TSCyL está siendo cómplice activo en el mantenimiento de la desigualdad y especialmente la desigualdad que sufren nuestras y nuestros jóvenes Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Castilla y León, una de las comunidades más duras con la diversidad afectivo sexual. Y es que en Castilla y León y en esta asignatura, llueve sobre mojado, pues la Junta de Castilla y León, con el apoyo del mismo TSCyL que ahora contradice al Tribunal Supremo, borró todas y cada una de las referencias sobre el respeto a la homosexualidad del temario de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, minando cualquier posible avance en la igualdad y la no discriminación de nuestro colectivo derivados de la asignatura.

En palabras de Ignacio Paredero, Presidente de la FECyLGTB, “la decisión del tribunal es extravagante e incomprensible, habida cuenta que el Tribunal Supremo falló precisamente en contra. Pero lo realmente preocupante es ver como tanto la Junta como el TSJCyL no tienen reparos en perseguir sistemáticamente cualquier intento de acabar con la homofobia de los centros escolares, sea a través de Educación para la Ciudadanía o de cualquier otra asignatura o contenido”.

Para terminar, queremos pedir a la ciudadanía y a las instituciones apoyo contra el gravísimo problema de la homofobia en los centros escolares, pues nuestras y nuestros jóvenes encuentran que sus centros son lugares no seguros para su pleno desarrollo.