El Pentágono se gasta 4’5 millones de dólares en preguntar a los militares su opinión sobre el final del «Don’t ask, don’t tell»
El fin de la política de «Don’t ask, don’t tell» en el Ejército de Estados Unidos es un camino plagado de obstáculos, pese al compromiso adquirido tanto por el Presidente Obama como por el Congreso. El Departamento de Defensa ha anunciado ahora la realización de una encuesta entre 400.000 militares para conocer su opinión sobre el tema. Los colectivos LGTB han reaccionado con indignación.
La mitad de los cuestionarios serán cumplimentados por militares en activo y la otra mitad por personal en la reserva. Al parecer, otros 150.000 cuestionarios parecidos serán enviados a esposos y esposas de militares. El cuestionario consta de alrededor de un centenar de preguntas en las que se interroga a los encuestados, entre otros temas, por cual sería su reacción en diversas situaciones si supieran que un compañero es gay o lesbiana, así como por su opinión sobre como podría afectar a la moral de la tropa.
Los colectivos LGTB estadounidenses han considerado insultante la realización de la encuesta, que interroga a los militares, por ejemplo, por cómo se sentirían al compartir baño o ducha con un compañero del que saben que es homosexual. También han criticado su alto coste (unos 4’5 millones de dólares). Puedes consultar la totalidad de la encuesta, que ya ha sido filtrada a los medios LGTB estadounidenses (en inglés) pulsando aquí.
El Pentágono ha alegado en su defensa que la encuesta forma parte del proceso por el cual debe certificar que por parte de los militares no hay obstáculos para poner fin a la política de «Don’t ask, don’t tell», tal y como el acuerdo alcanzado para su derogación entre la Casa Blanca y los congresistas especificaba.
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Acerca del Author
Flick
Flick no es más que el "nick" con el que empecé a comentar (y discutir, y razonar...) en dosmanzanas, allá por 2006. Me sabía a poco, por eso decidí colaborar y compartir mi pasión por estar informado. Y aquí sigo.
Un centener de preguntas estúpidas, entre las que se incluye si se sentiría incómodo compartiendo ducha si supiese que su compañero de al lado es gay; si, es que los gays somos seres sedientos insaciables de carne masculina, y pues no vayamos de repente a violar a uno de esos «suculentos» marines heteritos…
Mucha gente muriéndose de hambre en el mundo y gastando 4,5 millones de doláres en esas estupideces. Tenían que ser gringos.
Pero ¿que payasada es esta? Una encuesta de 2000 y vas que chutas para pulsar una opinion. ¿400000???? pero esta gente no sabe estadistica?
El tema es; quien esté incómodo con un compañero gay, QUE SE LARGUE. La única utilidad que yo le vería a este tipo de encuesta sería para determinar quienes están en contra de la igualdad de los gays, para así poder echarlos del ejército, ya que no demuestran capacidad para defender valores democráticos. En cambio en EEUU parece que funcionan al revés.