Nigeriano homosexual solicitante de asilo en el Reino Unido se enfrenta a deportación

Hope Nwachukwu es un hombre gay de 33 años que huyó al Reino Unido de la terrible homofobia que padecía en su país natal, Nigeria, y cuya deportación estaba planeada para el 16 de septiembre. Afortunadamente ésta fue pospuesta a última hora a instancias de un diputado, pero sólo hasta el 28 de septiembre, mientras las autoridades aclaran las circunstancias del caso.

La historia de Nwachukwu es una sucesión de terribles abusos y persecución por parte de su padrastro y de bandas, que llegaron a torturarlo y violar a sus hermanas para enseñarle “cómo se comporta un hombre de verdad”. Nwachukwu decidió buscar una vida mejor en el Reino Unido, adonde llegó a finales del año pasado sin saber que podía solicitar asilo. Tras conseguir trabajo con un documento de identidad falso fue detenido y lleva seis meses en un centro de detención para inmigrantes ilegales, habiéndosele denegado dos veces su solicitud de asilo y esperando su deportación planeada para la semana pasada.

No obstante, Iain Stewart, diputado conservador por la circunscripción de Milton Keynes South -donde Nwachukwu ha estado viviendo- intervino el mismo día de la deportación para detenerla. En palabras del diputado, “he sido informado esta misma tarde de este caso, y me preocupan los informes que mencionan la persecución a que se enfrentaría si volviese a Nigeria. Aunque no estoy el corriente de todos los detalles de la situación, me alegra que su deportación inmediata haya sido pospuesta y que el Ministerio de Interiores continúe sus pesquisas. Estaré atento y me aseguraré de que Hope reciba un tratamiento adecuado y de que los temores ante una posible persecución sean debidamente investigados”.

La coalición de consertadores y liberales que gobierna en el Reino Unido ya anunció hace unos meses que pondría fin a las deportaciones de personas que temieran persecución en sus países de origen por motivo de orientación o identidad sexual, acatando así una sentencia de la Corte Suprema británica, pero al parecer las solicitudes de asilo de Nwachukwu habrían sido rechazadas por no haber mantenido ninguna relación sentimental desde su llegada al país.

Un reciente informe de la organización Stonewall puso de relieve la «homofobia institucional» en el sistema de asilo del país y el activista Paul Canning ha añadido que «si bien es fantástico que Hope haya recibido una nueva oportunidad, es preocupante que su caso llegase a este punto y, en particular, que su sexualidad no fuera tenida en cuenta simplemente por no mantener ninguna relación con nadie. Me preocupa que [las instituciones] hayan pasado de su antigua excusa para denegar asilos, “vuelve a casa y sé discreto”, a “demuestra que eres homosexual”. Hay muchas otras personas aún detenidas por razones similares, […] y este caso muestra que la sentencia de la Corte Suprema no basta”.