«Caravana de travestis» rumbo al Orgullo Solidario de Torremolinos como protesta por el veto del Ayuntamiento

Para mí lo más escandaloso es el comunicado del Ayuntamiento (el cual enlazáis en vuestro post). Me he quedado indignado y estupefacto. Aparte del lenguaje burdo se arrogan el derecho de realizar juicios de valores, esto es algo que nadie que cobre un sueldo público puede hacer jamás sino que tiene que cumplir con su trabajo y no dar lecciones de moral como un vulgar predicador.
Lo peor es cuando vienen a decir que hay homosexuales buenos y malos, los buenos son aquellos que (supongo que además de votarles) no se organizan para reivindicar su derechos, tampoco ejercen su derecho de reunión y mantienen un perfil bajo, intentando pasar desapercibidos. Y vendrían a decir que son malos aquellos que hacen exhibicionismo y proselitismo de su homosexualidad, que son términos que utilizan como mantras los homófobos de piel de cordero. O sea, los malos serían aquellos que se organizan para reivindicar sus derechos, los que optan por juntarse con otros homosexuales y los que se hacen notar o exteriorizan su homosexualidad.

Concretamente me refiero al siguiente párrafo de ese comunicado (que más bien parece un anatema): «COLEGA Torremolinos, representa a un determinado número de homosexuales, pero en absoluto representa a todos los homosexuales torremolinenses, y mucho menos a aquellos que no tienen necesidad o no quiren presumir públicamente de su homosexualidad. Tampoco representa a los que rechazan los actos públicos de autoafirmación homosexual». O sea, «presumir» y «actos públicos de autoafirmación»…eso es lo que dicen, sí señor. (Y encima sólo este párrafo con una falta de ortografía: “quiren”)

Y después, ese desprecio hacia el turismo gay me parece execrable porque ellos saben que gran parte de su éxito se debe a ese tipo de turismo. Desde hace unos años apuestan por el turismo geriátrico noreuropeo y por eso reniegan de los homosexuales (para no molestar a un público conservador) y no quieren que los identifiquen con ellos. Paradójicamente, las noticias referidas a ese segmento turístico (al del jubilado comunitario) es que están intentando marcharse de España urgentemente (en cuanto puedan vender su viviendas) por el encarecimiento de la vida, el descenso de la calidad de los servicios públicos, como el sanitario, y, sobre todo, por la reciente reforma fiscal del Gobierno que pretende hacerles tributar no sólo por los bienes e ingresos que puedan tener en España sino también en el extranjero. O sea, que el sueño de convertirse en el mayor geriátrico de Europa, aparte de algo tétrico, es un «sueño» fallido.

Por otro lado, Torremolinos no tiene nada que ofrecer en sí mismo salvo el mismo sol y playa que en el resto de España y el Mediterráneo, algo que no es atractivo suficiente si tenemos en cuenta la pérdida de competitividad de España debido a la subida de precios (entre otras cosas por ser miembro de la Eurozona), por lo que sólo los destinos con mejor calidad y oferta turística pueden resaltar. Y como dije, este pueblo no tiene nada en sí mismo, no tiene monumentos, oferta cultural ni lúdica, riqueza paisajística ni natural… sólo ofrece un urbanismo masificado y hacinamiento… y realmente el único aliciente para el público homosexual es poder expresarse libremente (independientemente de que en su vidas cotidianas estuviesen en el armario o no) y relacionarse con su iguales, pues para estar en (o volver a) el armario y no coincidir, apenas, con otros gays mejor se quedan en sus casas. Si se cargan ese ambiente van a desincentivar la llegada de gente de ese colectivo del que quieren su dinero pero no quieren que lo identifiquen con ellos. Y yo me alegraría pues demuestran que aparte de homófobos son bastantes desagradecidos.
Por último, respecto a la prohibición de las drag-queens me parece una catetada pues de entrada cualquier persona puede travestirse en su vida cotidiana y nadie le puede decir nada, tendría guasa que no permitan a las drags estar en el escenario pero la platea estuviese llena de ellas. Para mí lo más grave es el «argumento» que se da para prohibir su presencia y el comunicado antes mencionado que es más insultante todavía. Desde luego que algo está pasando en Torremolinos y no es nada bueno.