Dos menores de 15 y 17 años condenados a 6 y 8 meses de trabajos socioeducativos por una agresión homófoba en Pamplona

Dos menores de 15 y 17 años de edad han sido condenados a 6 y 8 meses de trabajos socioeducativos tras reconocer que en marzo de 2017 agredieron a una pareja de chicos que iban de la mano en Pamplona. 

En su momento informamos de la agresión: Dos chicos caminaban cogidos de la mano en la noche del 31 de marzo de 2017 por la calle Abejeras de la capital navarra cuando de repente uno de ellos recibió un puñetazo en la cara. La agresión partió de los dos menores ahora juzgados, que por fortuna fueron identificados en los días posteriores, gracias entre otras cosas a que uno de ellos alardeó en redes sociales de la agresión.

Poco después de la agresión, Diario de Navarra publicó una entrevista a uno de los chicos agredidos, que admitió haber necesitado tomar medicación contra la ansiedad en los días que siguieron a la agresión. El joven, de 21 años y estudiante universitario, atribuía las actitudes homófobas de los menores como los que le agredieron a una mezcla de falta de información y a la educación recibida en sus propias familias.

Los agresores se han librado de una pena mayor gracias a su condición de menores de edad. El juicio tuvo lugar el pasado miércoles en Pamplona. La tarde anterior, decenas de activistas se concentraron delante del Palacio de Justicia bajo el lema «Ninguna agresión sin respuesta», convocados por la plataforma E28J, que agrupa a diversos colectivos LGTB navarros.

Navarra: incidentes de odio por LGTBfobia se duplicaron en 2016 respecto a 2015

De acuerdo al informe sobre delitos de odio del Ministerio del Interior correspondientes a 2016 (las cifras oficiales de 2017 aún no han sido hechas públicas), Navarra registró ese año un total de 10 incidentes de odio relacionados con la orientación sexual o identidad de género de las víctimas, 5 más que el año anterior. De 2015 a 2016 hubo, por tanto, un aumento del 100% de los incidentes. Se trató, de hecho, de la cuarta provincia más afectada, tras Barcelona, Madrid y Vizcaya.

No conviene olvidar, en cualquier caso, que las cifras de Interior corresponden a los incidentes registrados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y por tanto son inferiores a las reales. Una discordancia que de hecho ya ponen de manifiesto las cifras proporcionadas por los observatorios gestionados por colectivos LGTB.