El primer ministro francés anuncia la presentación del proyecto de ley de matrimonio igualitario en octubre

El nuevo Gobierno socialista francés no parece sentirse intimidado por la iglesia católica, que en un gesto inusual en el país vecino aprovechó la festividad de la Asunción de la Virgen para mostrar su oposición a una de las medidas ya anunciadas por el nuevo ejecutivo: la aprobación de una ley que permitirá a las parejas del mismo sexo contraer matrimonio. El primer ministro, Jean-Marc Ayrault, ha anunciado que el proyecto se presentará en octubre.

Ha sido en la universidad de verano de las juventudes socialistas celebrada este fin de semana en La Rochelle. Allí, ante los jóvenes socialistas, Ayrault ha puesto fecha al proyecto: su presentación se hará a finales de octubre. Ayrault, de esta forma, ha delimitado de forma más precisa el escueto anuncio que ya había hecho hace unas pocas semanas, en vísperas de la celebración del Orgullo LGTB de París. Precisamente en la marcha de París, en la que estuvo presente la ministra de Familia Dominique Bertinotti, esta se mostró confiada en que 2012 fuera el último año en que el Orgullo parisino se celebrara sin que las parejas del mismo sexo disfruten del derecho a contraer matrimonio. Todo apunta a que así será, efectivamente.

Las intenciones del Gobierno francés de aprobar el matrimonio igualitario cuentan con la oposición tanto de la iglesia católica, cuyo máximo representante en Francia, el cardenal André Vingt-Trois, ordenó el pasado 15 de agosto que en todas las parroquias de Francia se rezara en defensa del modelo tradicional de familia, como con la oposición de los principales líderes de la derecha política, enfrascados en plena batalla por hacerse con el testigo de Nicolas Sarkozy pero que en este aspecto coinciden.