"Si se suman dos manzanas, pues dan dos manzanas. Y si se suman una manzana y una pera, nunca pueden dar dos manzanas, porque es que son componentes distintos. Hombre y mujer es una cosa, que es el matrimonio, y dos hombres o dos mujeres serán otra cosa distinta" - Ana Botella

La diversidad LGTB que promueve el MOVILH en Chile se impone al “bus del odio” de HazteOír

HazteOír, a través de su marca internacional CitizenGo, sigue buscando la atención mediática con su penoso espectáculo a favor de la estigmatización del colectivo LGTB. El tristemente conocido “bus del odio”, que esta organización empezó a hacer rodar en España y que ya ha pasado por otros países como los Estados Unidos o Colombia, continúa su cruzada LGTBfóbica, ahora en Chile. Como contrapeso, el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (MOVILH) le está pisando los talones al “bus del odio” con su llamado “bus de la diversidad”, que está recibiendo un gran apoyo social y mediático, en contraste con el vehículo discriminatorio de la organización ultraderechista y sus entidades satélites. En todo caso, hay que destacar que, al menos, hay nueve detenidos por incidentes relacionados con el “bus del odio” de HazteOír, entre ellos el autoproclamado “pastor” Soto (conocido por su hostilidad hacia los derechos LGTB).

Como venimos informando en dosmanzanas desde hace días, el “bus del odio” de HazteOír continúa con su periplo LGTBfóbico en Chile, iniciado el pasado lunes. El vehículo, sin embargo, se vio obligado a abandonar este miércoles las puertas del Congreso Nacional de este país por orden de los Carabineros, ante la indignación de la comitiva ultraconservadora.

Marcela Aranda, portavoz del Observatorio Legislativo Cristiano (una de las entidades chilenas que apoyan la campaña de odio de HazteOír), ha justificado la visita del bus discriminatorio al Congreso, alegando que “queremos saber quién es quién, qué diputados están a favor y quiénes en contra de la ideología de ‘género’, que respondan ante ciudadanía sobre esta reforma moral y antropológica”.

En realidad, no resulta muy difícil apuntar los nombres de los parlamentarios chilenos abiertamente hostiles a la diversidad sexual y de identidad de género. Aunque no son muchos en su conjunto, los ecos de sus discursos provocan ruido mediático. Apenas una docena de diputados y senadores han dado su apoyo explícito al “bus del odio”: José Antonio Kast (independiente y candidato presidencial), el Rojo Edwards (independiente), Jorge Rathgeb (RN) y los congresistas de UDI Felipe Ward, Gustavo Hasbún, Enrique Van Rysselberghe, Juan Antonio Coloma, Cristian Ruiz, Osvaldo Urrutia, María José Hoffmann, David Sandoval e Iván Norambuena.

Lo que más parece molestar a los promotores del “bus del odio” es que tuvieron que “desalojar la zona, una hora antes de la comparecencia de los medios de comunicación”, mientras que “el bus azul, llamado de la Diversidad, pudo dar un par de vueltas al Congreso en el momento en el que estaban todos los medios tomando declaración a los seguidores de ambos vehículos”.

Califican a Bachelet como “la Zapatero chilena”

Actuall, panfleto digital ultraconservador en la órbita de HazteOír, ha calificado a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, como “la Zapatero Chilena” (aludiendo al impulso de leyes igualitarias en España bajo la presidencia de José Luis Rodríguez Zapatero). Para este “medio” satélite de HazteOír, “muchos [chilenos] tienen, además, la sensación de que el Gobierno Bachelet (la Zapatero chilena), que ya es un pato cojo, a solo cuatro meses de las elecciones y de retirarse de la política, ha apretado el acelerador de la ingeniería social”.

Lo cierto es que el Gobierno de Chile ha criticado la intolerancia que produce el “bus del odio” de HazteOír. Su portavoz, Paula Narváez, daba las gracias a través de su cuenta de Twitter a todos los que “se han manifestado con respeto por un país inclusivo con todxs”, en clara referencia a los activistas LGTB del MOVILH, así como a los ciudadanos que están respaldando la igualdad de derechos estos días en la calle.

El “bus de la diversidad” contrarresta el odio que irriga HazteOír

El MOVILH fue meridianamente claro cuando declaró públicamente que se encargaría de seguir cada paso recorrido por el “bus del odio” de HazteOír con su propio “bus de la diversidad”. Ramón Gómez, en calidad de presidente del MOVILH, ha explicado que “nuestro objetivo es difundir información desprejuiciada, respetuosa y digna sobre las personas lesbianas, gais, bisexuales, transexuales e intersexuales (LGBTI), sobre las familias homoparentales y sobre los niños/as LGBTI e hijos de parejas del mismo sexo. No podemos permitir que, sin contrapeso, el ‘bus del odio’ llegue a distintas zonas del país con un lenguaje que desinforma, miente y perjudica a seres humanos inocentes”.

El llamado “bus de la diversidad”, como recogíamos hace unos días en dosmanzanas, está cubierto con frases célebres de Gabriela Mistral y de Pedro Lemebel. “El futuro de los niños siempre es hoy. Mañana será tarde” es la frase de Mistral. La de Lemebel, por su parte, dice así: “Hay tantos niños que van a nacer con una alita rota y yo quiero que vuelen, compañero”.

Cabe destacar, en otro orden de cosas, que las redes sociales se han convertido, una vez más, en el escenario de batalla entre partidarios de la discriminación y el odio LGTBfóbico y entre los defensores de la igualdad de derechos. En Twitter, por ejemplo, nos ha llamado la atención una imagen posteada por distintos usuarios, comparando el “bus del odio” de HazteOír con uno que hizo propaganda contra el sufragio de la mujer en la década de los 60:

Al menos nueve detenciones por incidentes relacionados con el “bus del odio”

Después de recorrer Recoleta, Puente Alto y Santiago, el «bus del odio» de HazteOír ha proseguido su andadura LGTBfóbica por Chile. Concretamente, el miércoles llevaba a Valparaíso su mensaje contra la educación sobre diversidad sexual en los colegios. Al igual que en la Región Metropolitana, se produjeron incidentes que, por ahora, arrojan un balance de nueve detenidos, incluyendo al autodenominado «pastor» Soto.

Este personaje fue condenado a finales de 2015 por acoso y agresión contra el activista del MOVILH Rolando Jiménez. Así rezaba la sentencia: “El querellado Carlos Javier Soto Chacón, quien dice ser predicador evangélico y se hace llamar “Pastor Soto”, en reiteradas oportunidades, ha abordado en la vía pública a la víctima don Rolando Jiménez Pérez, activista y dirigente histórico del Movimiento de Liberación Homosexual (MOVILH) gritándole a viva voz: sucio, pervertido, sodomita, pecador, hijo del diablo que defiende pedófilos, entre otros insultos de similar naturaleza”.

Pero el historial agresivo y homófobo de Soto es mucho más amplio: desde pisotear una bandera arcoíris, pasando por difamaciones contra el libro infantil inclusivo Nicolás tiene dos papás, hasta colarse en una comisión del Congreso para increpar a los diputados partidarios de ley de uniones civiles, abierta a parejas del mismo sexo

Por su parte, las diputadas comunistas Karol Cariola y Camila Vallejo lograron colgar de la fachada del Congreso Nacional de Chile las banderas trans y arcoíris (emblema de la comunidad LGTB).

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