Denuncian que la Xunta de Galicia discrimina a las personas con VIH a la hora de acceder a un ciclo formativo de peluquería

Una vez más las personas que viven con VIH son objeto de discriminación, en esta ocasión en Galicia. Según ha denunciado Lazos Pro-Solidariedade-Comité Antisida de Ferrol, uno de los requisitos solicitados para matricularse en un ciclo formativo de peluquería en el instituto de enseñanza secundaria Carballo Calero de Ferrol consiste en la entrega de un certificado médico que acredite que no se padece «enfermedad infecto-contagiosa». En la práctica, esto supone la exclusión de las personas con VIH.

Tal y como ha explicado el presidente de Lazos Pro-Solidariedade, Carlos Varela, “el VIH es un virus que no se contagia, ya que se transmite de forma no casual y con prácticas muy concretas. Por ello CESIDA y sus entidades miembro reivindicamos su exclusión del catálogo de enfermedades infecto-contagiosas, ya que supone en muchos casos el motivo de exclusión en el acceso a determinados servicios, tanto privados como públicos, e incluso en el ejercicio de algunos derechos”. «Conocer las vías de transmisión del VIH permite valorar esta exigencia para ser aceptado en el ciclo formativo como un acto de discriminación inaceptable e incomprensible«, ha añadido Varela, que es además secretario general de CESIDA (la Coordinadora Estatal de VIH-Sida).

CESIDA, de hecho, ha emitido un comunicado en el que respalda la denuncia de Lazos Pro-Solidariedade, destacando que «relacionar la transmisión del VIH con el desarrollo de las funciones como peluquero/a contradice los mensajes sobre prevención que lanzamos las organizaciones que trabajamos en el ámbito del VIH y sida, contribuyendo a la estigmatización de las personas con VIH y dificultando el acceso al diagnóstico por temor al estigma y la discriminación».

Desde la Consellería de Educación de la Xunta de Galicia se sostiene que en ningún caso el requerimiento de un certificado médico ha sido pensada para excluir a ningún colectivo, sino que se trata «de un sistema de prevención» a través del cual se conocen las dolencias de los futuros alumnos para poder actuar adaptándose a sus necesidades concretas en casos extraordinarios que se puedan dar mientras estos se encuentran en el entorno lectivo.

ALEAS-EU exige a la Xunta una rectificación

También desde el ámbito del activismo político LGTB se ha denunciado lo sucedido. ALEAS-EU (Área de Liberdade de Expresión Afectivo-Sexual de Esquerda Unida) ha hecho público un comunicado en el que exige a la Xunta una rectificación y anuncia que el grupo parlamentario de Alternativa Galega de Esquerda (que cuenta con nueve diputados en el Parlamento gallego) pedirá explicaciones.

Para la diputada de dicho grupo Eva Solla es fundamental además revisar la catalogación de la infección por VIH como «dolencia infecto-contagiosa», indicando que sería más preciso y evitaría este tipo de situaciones su consideración de «dolencia infecto-transmisible», tal y como vpor otra parte vienen reclamando CESIDA y otras organizaciones de lucha contra el VIH.

Un anacronismo que da pie a justificar la discriminación

Este de Ferrol no es ni mucho menos el primer episodio de discriminación contra las personas que VIH que se argumenta o justifica en base a la catalogación de esta infección como «infecto-contagiosa», un anacronismo que resulta insostenible desde el momento en que se conocen a la perfección las vías de transmisión del VIH. El año pasado saltaba por ejemplo a los medios la discriminación que mantenía el Ayuntamiento de Madrid contra las personas con VIH, a las que se les prohibía ejercer como taxistas precisamente por la misma razón. Una discriminación contra la que también CESIDA se movilizó activamente.