Javi Cuho (escritor): «Nunca me he empalmado leyéndome a mí mismo»

 

Javi Cuho es de Barcelona y tiene 37 años. Escritor y guionista. «Soy psicólogo de formación y trabajo en una universidad desde hace algunos años», comenta. En 2005 publicó su primer cómic, No te esperaba, y desde entonces no ha parado. Sus más de diez trabajos se han publicado en español, inglés, italiano y francés.

En Como si nadie estuviera mirando habla de las cicatrices que el tiempo curte en la piel de uno. ¿Cuántas tiene usted?

Ya he perdido la cuenta, entre las que se ven y las que no se ven, pero creo que con el tiempo he aprendido a apreciarlas como botines de guerra, más que como recuerdos dolorosos. Sin ir más lejos, hace un año me caí en plena calle y me hice una brecha enorme en la cabeza, y hoy se ha convertido en una cicatriz que me da mucha personalidad [se ríe].

¿Liga más desde que se abrió la cabeza entonces?

La cabeza hay que tenerla abierta siempre. No solamente para ligar.

¿Ahora escribe poemarios porque es un blandengue a tiempo completo?

Siempre he escrito poemas, pero no son precisamente blandengues.

¿Le dedicaría un ejemplar a Santiago Abascal?

¿Para qué querría él una dedicatoria y un libro mío?

¿A sus parejas también les lee poesía?

La verdad es que no soy de recitarle a mi pareja. Pero es algo que me gusta hacer, y que de niño hacía con mi madre, por ejemplo.

Empezó a escribir tebeos siendo un pipiolo. ¿A quién imitaba entonces?

Me encantaban los cómics de un colectivo de artistas japonesas que se llaman CLAMP. Su cómic Tokyo Babylon me volvía loco y fue uno de los motivos por los que me animé a escribir cómics.

¿Sobornaba entonces a su hermano para que leyera lo que escribía?

Nunca me hizo faltar sobornarlo. Yo soy el hermano mayor. Siempre ha sido mi lector beta (o mi conejillo de indias, si quiere).

Le tiene cariño a la temática sexual. ¿Alguna vez se ha empalmado autoleyéndose?

Tanto como eso, leyéndome a mí mismo, la verdad es que nunca. Aunque si esa es la reacción de algunos lectores, yo feliz.

¿Qué autores le ponen a tono a usted?

En el terreno de la literatura, la cosa andaría entre Jean Genet y Baudelaire. Y en el del cómic, Gengoroh Tagame, por convertir en casi mainstream lo más underground.

¿Siempre ha llevado el porno en las venas? 

Si como porno entendemos la expresión de la sexualidad y el erotismo, supongo que sí. No hay nada más natural que eso.

«Prácticamente lo hago todo con música». ¿Qué cosas hace en modo mute?

Creo que dormir y poco más. Incluso escribir lo hago con música.

¿Y a qué ritmos le pide el cuerpo escribir?

Siempre música que me ayuda a situarme y a evadirme, sea el ritmo que sea. Ahora me ha dado por redescubrir toda la discografía de Grace Jones y tengo a mi pareja y amigos un poco hartos, ¡ja, ja!

¿En qué anda metido ahora?

En promocionar, viajar mucho y seguir escribiendo, hasta que el cuerpo y la mente aguanten.